Orígenes de las luces navideñas
Las luces navideñas tienen su origen en las clases altas alemanas del siglo XVII, que decoraban sus árboles de navidad, pinos, con luces. Está relacionado con el nacimiento de Jesús, quien vino a traer la luz entre las tinieblas.
Los orígenes de las luces navideñas y el árbol de navidad tienen raíces en el mundo nórdico y germánico. Es una tradición relacionada al árbol del mundo, el axis mundi, que conecta todos los mundos espirituales con el mundo humano. También está relacionado a Santa Claus, que tiene su antepasado en el culto a Odín, quien era el encargado de los cambios místicos en estas fechas.
Esta tradición, por medio del consorte de la reina Victoria, penetró en Inglaterra. De allí, mediante la emigración, a Estados Unidos y el resto del mundo anglosajón.
En un principio las luces se limitaban al árbol, mediante la colocación de lámparas con velas o lámparas de aceite colgadas del árbol. Pero esto cambio progresivamente con la invención de la luz y se fue extendiendo a otras partes de interiores y exteriores, tal como lo conocemos actualmente.
La navidad y sus orígenes en el siglo XIX
Santa Claus tiene sus inicios en la cultura popular en el siglo XIX. Nace del mundo germánico y nórdico. Uno de los primeros poemas que describen a Santa Claus data del año 1823. Posteriormente se trabajo el tema de Santa Claus en imágenes y pinturas. Este tipo de festejo estaba ligado a la felicidad de los niños. Los regalos de navidad tienen su origen en la cultura de estas épocas. Era el comienzo de la revolución industrial. La naciente industria en Inglaterra y Europa también comenzaba a introducir métodos industriales en negocios tradicionalmente artesanales como la fabricación de juguetes, pero también elementos como la decoración de navidad. Esto, en su momento, llevaría a la creación masiva de luces de navidad de carácter industrial.
La novela corta Canción de navidad, escrita por Charles Dickens, vio su aparición por primera vez en 1843. Es en esta novela donde comienzan a codificarse los ideales navideños. La idea de la bondad con los menos favorecidos ya era un ideal cristiano, sólido en el corazón de los occidentales, pero la asociación a la navidad como una época de bondad, de arrepentimiento y de redención comienza en estos momentos.
Orígenes de Santa Claus
Algunas tradiciones sitúan la figura de Santa Claus en la figura del obispo cristiano Nicolás de Bari, que vivió en Anatolia en el siglo IV, en los valles de la actual Turquía. Otros orígenes sitúan a Santa Claus en la tradición nórdica pagana, en el mismísimo Odín. Su llegada en la víspera de la navidad es una gran celebración para los niños, pues es el encargado tradicionalmente de traerles los regalos que pidieron para navidad.
Las luces de navidad también sirven para celebrar a esta figura. Es especial la alegría de esta figura con relación a las luces. Las sonrisas de los presentes, la reunión de todos los familiares, hermosos recuerdos de veladas navideñas celebradas anualmente con todos en la familia.
El culto a Divino Niño
Una de las mayores advocaciones de la Divinidad, nuestro Divino Niño también es celebrado por las luces y la fiesta de la Navidad. En nuestra colombianidad, la idea del Divino Niño nos alegra en estas fechas patrias. Es ideal celebrarlo con las luces adecuadas, montadas adecuadamente por profesionales.
El culto al Árbol de Navidad
El culto a los árboles es una tradición antiquísima, en varias regiones del mundo esta veneración adquiere distintos significados y señales.
En el mundo céltico, esta religiosidad adquiere profundidad en el alfabeto ogham, basado en diversos árboles del mundo celta, como el roble, el fresno o el sauce. El árbol de manzana, sagrado para el dios celta Abellio, adquiere un significado especial en cuanto a su poder de iluminación y ascenso en la aventura humana.
En nuestro mundo moderno, nuestra navidad, el árbol significa el nacimiento de Jesús. La llegada de Niño Dios, la luz que ilumina al mundo. Este tipo de celebración hace que nuestros corazones quieran alegría. Para esto es excelente las luces de navidad. Con las luces de navidad no solo alumbramos nuestros espacios de manera festiva, sino que promovemos en nuestros corazones la alegría de la llegada al mundo del Niño Jesús.
El significado de la navidad
La navidad celebra la venida de Jesús, su nacimiento en la Tierra como Dios hecho hombre. Su celebración se celebra en todo el Occidente y sus antiguas colonias, donde hubo cristianización y creencia en el cristianismo.
Su llegada representa la luz entre la oscuridad, por esto las luces. El fuego, la luz y la iluminación juegan un papel sumamente importante en el concepto de lo que Jesús representa para el mundo.
La celebración con luces de navidad exalta el espíritu cristianismo de la navidad y da un espíritu festivo a un gran ritual en las familias del mundo que cree en Jesús como Dios.
Orígenes antiguos
Este tipo de celebraciones en el final del año, en relación con luces y nacimientos es un arquetipo antiguo. Estaba relacionado a la celebración del solsticio de invierno. Antaño se celebra en las culturas paganas el nacimiento de Dionisos, el nacimiento de Adonis, así como el nacimiento de Osiris. El mito del niño Dios que nacía de la Madre ha estado presente en todos los estadios de la humanidad. Es por esto por lo que la necesidad de la iluminación en estos tiempos del año no es solo para cristianos, sino que atañe a todos los humanos por su herencia común en las civilizaciones antiguas.
La evolución de las luces navideñas
Las luces navideñas tuvieron una revolución con la invención de la luz, inventada por Nikola Tesla o Thomas Edison. Edward Hibberd Johnson, quien contrató a Thomas Edison, cuando ya estaba inventada la luz eléctrica, tuvo la brillante idea de colocar cien bombillas de color azul, rojo y blanco y ponerlas alrededor de su árbol de navidad.
Pronto esto dio paso a la tradición que hoy conocemos. Las luces de navidad se han convertido en un espectáculo alrededor de todo el mundo. En Bogotá, por ejemplo, durante estas fechas es un paseo el simple hecho de ir a ver las luces en varios edificios, estructuras metálicas y centros comerciales.
Las luces de navidad dan calidez, alegría y señalan la navidad a quien las ve. Ejerce la función de recordar el nacimiento de Jesús y su celebración. Es una grata memoria para todos los que la vieron cuando fueron niños. Alegra el alma de jóvenes y adultos por igual.
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